martes, 6 de octubre de 2009

Dile no a la flojera

No hay causa más digna que realizar una tarea bien hecha, renunciar a trabajar es renunciar a ser creativo, a ser colaborador de la creación, me imagino que si un ser humano no trabaja, no enfrenta desafíos, no tiene obstáculos por superar, y si además recibe sin esfuerzo su alimento, a este tipo de personas puede considerársele cualquier cosa, pero nunca un ser humano.
El ser humano es un auténtico milagro porque posee la capacidad de realizar milagros, hacer que lo imposible suceda, gracias fundamentalmente a su esfuerzo creador. El secreto del éxito está dentro de cada ser humano, así como si partimos a la mitad una manzana invariablemente encontraremos una estrella de cinco puntas, así en el interior de cada uno de nosotros llevamos la estrella del esfuerzo, la energía necesaria para alcanzar todo aquello que nos propongamos.